Sitio Arqueológico El Cerrito

A sólo diez kilómetros del centro de Querétaro, en el municipio de Corregidora, se encuentra la zona arqueológica “El Cerrito”. El reconocimiento turístico que le es proporcionado a la zona no parece compararse al que merece. Pocos minutos antes de llegar, se puede observar desde la distancia una imponente estructura que pone en evidencia la existencia de culturas prehispánicas en el estado de Querétaro.

Con sus 30 metros de altura, la pirámide del pueblito nos encanta con sus estructuras construidas durante el auge de Teotihuacán, entre los años 700 y 1200 d.C. El estuco, un material utilizado por culturas prehispánicas, piedras y tierra conforman la composición principal de la pirámide, donde se pueden apreciar los 13 puntos escalonados que en su momento estuvieron recubiertos por pigmentos rojos, azules y ocre, representantes de la concepción del mundo según estas culturas. En los alrededores de la pirámide yace la Plaza de las Danzas, el Altar de Cráneos y el Palacio de los cuatro altares.

En su momento, la pirámide y sus alrededores funcionaba como centro ceremonial, uno de los más importantes de los toltecas, debido a su ubicación en la zona norte de Mesoamérica, cuyos asentamientos habitacionales llegaban hasta lo hoy conocido como Balvanera, Santa Bárbara y la Negreta. La pirámide fue utilizada por diversas culturas a lo largo de los años, entre ellas la Chupícuaro, Teotihuacán, Toltecas, Chichimecas, Purépechas y Otomíes.

En su parte superior tiene una estructura construida en 1887, la cual era utilizada como casa de habitación por el terrateniente de la Hacienda el Cerrito. La casa está construida con un estilo ecléctico y neogótico.

Es importante aprovechar y conocer la zona arqueológica “El Cerrito” ya que nos da un mejor entendimiento sobre las culturas prehispánicas que habitaban en Querétaro y cómo a raíz de la misma se han basado tradiciones y culturas milenarias.