La historia detrás de los muros

Conoce un poco más sobre las haciendas del estado.

Este mes se conmemora una de las fechas más importantes para el país por ser el inicio de la lucha revolucionaria que, tras diversos enfrentamientos a lo largo y ancho del territorio mexicano, desembocaría en la conquista de derechos sociales, establecidos, años después, en la Constitución de 1917, promulgada en la ciudad de Querétaro.

Las grandes haciendas fueron algunos de los principales lugares donde surgieron también las grandes desigualdades, y por ende, la mayor parte de los levantamientos armados, saqueos y las escenas típicas de la Revolución Mexicana.

En Querétaro se encuentra un sitio, único en su tipo, donde la Revolución Mexicana es parte de la experiencia de todo viajero: Hotel Misión La Muralla. Este es el único hotel temático de la Revolución en todo México. “La Tropa” (un grupo de actores caracterizados) de soldados y adelitas te harán sentir la intensidad de su lucha por hacerte pasar la mejor estadía en este hotel ubicado en Amealco, es una recomendación especial para avivar tu amor por México.

Para seguir en este tono, te proponemos conocer tres haciendas más, que, si bien estarán libres de caudillos, soldados y adelitas, te aseguramos que te transportarán en el tiempo.

Hacienda Viborillas es una lujosa ex hacienda de tipo colonial, construida en el siglo XVIII, que fue restaurada para ser actualmente uno de los venues más importantes de Querétaro. Bodas, aniversarios, eventos empresariales y sociales lucen la excepcional arquitectura del lugar. Los asistentes quedarán maravillados con su tren/museo que luce en sus vagones auténticos escaparates de una antigua barbería, botica y cantina al estilo antiguo, para adentrarte en una atmósfera propia de la hacienda. Además, su restaurante Muro de Piedra, especializado en cocina mexicana gourmet, te sorprenderá.

En el municipio de El Marqués, Mesón Real de Plata también fue testigo de luchas, pero entre españoles y los indios chichimecas que habitaban la región. Este fue uno de los primeros fuertes militares construidos en territorio queretano. Erigido en el siglo XVI, durante la Conquista este emplazamiento español sirvió como almacén para resguardar los minerales, principalmente la plata, que se extraían en Zacatecas y Guanajuato y se trasladaban a la Ciudad de México, a través de lo que se llamó Camino Real de Tierra Adentro. Actualmente, este es uno de los sitios contemplados en esta antigua ruta mercantil nombrada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Actualmente es un estupendo lugar para el descanso y disfrutar de sus habitaciones, jacuzzi, paseos a caballo, gimnasio, spa, y más.

Finalmente, a muy pocos minutos de la capital queretana se encuentra Hacienda Lagunillas, terminada en el siglo XIX y casa de Rafael Camacho Guzmán, uno de los gobernadores de Querétaro. Esta ex hacienda de tipo colonial es ideal para bodas y eventos especiales por el estilo rústico que envuelve cada rincón, cuenta con algunas habitaciones especiales para los novios y un reciente restaurante de comida campirana de nombre Labrantío.

¿Ya conoces alguna de estas haciendas? Compártenos tus fotos en todas nuestras redes sociales con el #asomarteqro